¿Sabes algo que odio?

Llovía, llovía y yo escribía en mi diario arriba de un camión camino a casa. Cuando me di cuenta de qué estaba escribiendo vi la página llena de «I’m coming up only to hold you under» (es una canción muy buena, por si tenían la duda).

De repente sentí que alguien me miraba. Oh sorpresa: un terrestre del tipo joven masculino. Creo que me miraba con interés porque iba escribiendo a pesar de lo incómodo que era con el movimiento del camión. Extrañamente no me incomodó que lo hiciera.

Llegamos a la base y todos bajamos. Íbamos caminando muy armoniosamente: si yo bajaba la velocidad el también y si comenzaba a acelerar el paso él hacía lo mismo. «Aleatoriedad Sincronizada paralela.» Todo se sentía muy natural.

-Disculpa, ¿me puedes dar la hora por favor?-preguntó amablemente.
(Oh no, la típica, luego aprendí la lección)

-Claro, son las cinco quince.

-Gracias.

Seguí caminando en dirección al metro.

-Oye…

Me volté, esperaba que me dijera algo más, de verdad quería hablar con él. No sé si esperaba que me diera los secretos del mundo, pero definitivamente sé que no esperaba un

-Eres muy linda.

-¡Ja! Gracias-dije cortantemente-.

Me sentía sumamente ofendida, si no era lo peor que pudo haber dicho, no era lo más interesante. Quería que fuera interesante.
Seguí mi camino, y a mi pesar, el se dirigía al mismo lugar que yo. Otra vez ese caminar, otra vez los mismos pasos.
Me reí sarcásticamente; él se limitó a sonreír.

-¿Tienes novio?

El muchacho a lo que iba.

-No-dije sin parar de caminar-.

Quería que desapareciera.

-¿Qué tienes?-me miró con un poco de preocupación-.Pareces desesperada.

-Pues sí, ahora siempre estoy así. («Estoy huyendo de ti, amigo.» Pensé internamente)

-¿Por qué, te pasó algo?

-N…no sé. Es desencanto…creo.

Decía la verdad. No entendía que pasaba últimamente con la gente encargada de comprobar mi estado mental

-¿Por? ¿Alguien te decepcionó?

-Sí. No. No sé, ¿el mundo?

-Oh…sí, es difícil. El mundo…

¿Saben algo que odio?
Cuando quiero gritar y no puedo.

-Que estés bien-se despidió finalmente-.

De la amistad y otros demonios.

Voy a hablarles de la amistad, porque no soy la más indicada para hablarles de amor y porque las fechas ameritan éstos temas.

No soy la mejor amiga del mundo, de hecho no soy ni buena, pero creo saber lo que es la amistad, no sé si la he correspondido como se debe, pero seguro que la he sentido.

La amistad es éso que te permite abrazar a alguien fuertemente mientras saltan juntos dentro del charco más grande que se ha formado fuera de la secundaria después de llover, cerrando con fuerza los ojos y sonriendo mientras sientes el agua llegar hasta tus rodillas.

Es compartir con alguien las papas más picosas para que a nadie le duela el estómago después.

Los amigos se golpean en clase de historia.

Si el perro de alguien a quien te atreves a llamar amigo muere, la amistad se representa haciendo bromas estúpidas e insistiendo con abrazos hasta que sus ojos dejen de estar llorosos o ése alguien se harte. Lo que pase primero.

Es esperar el pesero bajo la lluvia con alguien, aún cuando tú vives a dos cuadras y llueve realmente fuerte.

La amistad, también consiste en compartir e inhalar un globo de helio.

Los amigos corrigen tus faltas de ortografía.

Un buen amigo se encarga de ser el cura en la boda de su amigo… O no.

Los amigos te devuelven tu cuaderno de francés perdido, no sin antes dejar que descargues tu ira y destruyas tu celular :(.

Los amigos te cubren en el trabajo cuando faltas para ir a una convención friqui.

Los verdaderos amigos te ayudan a ganar apuestas.

A los amigos no les importa si eres inexpresiva o vegetariana entre semana… Jijijí, «entre semana».

Los amigos no te acusan con la maestra de Artes plásticas cuando tallas gis blanco en su silla porque te regañó.

La amistad significa saberte el apodo familiar más gracioso de alguien y no usarlo para no hacerlo llorar… Otra vez.

Los amigos se visitan en la enfermedad y se dejan ganar en el Super Smash Browl de wii, sólo para que te sientas mejor.

Los verdaderos amigos hacen tu tarea de foto sin algo a cambio.

La amistad significa perdonar a alguien cuando te escribe WTF en el cuello o te tiran una bonafina desde el segundo piso. SE PERDONAN.

Los amigos responden las bromas hirientes con más bromas. En general, responden cualquier broma con más bromas.

La amistad significa avisarle que sus calzones floreados están visibles, y luego, fingir que le crees cuando te dice que era una blusa.

Significa acompañar a alguien a buscar su arco de contrabajo debajo de los coches.

Los amigos defienden a sus amigos con bancos del taller de artes plásticas.

Es compartir un juego de fifa o guitar hero en horas de trabajo.

La amistad significa ir al concierto de un amigo aunque esté aburridísimo y cante horrible, y luego decirle lo contrario… Nocierto, sí estuvo bonito.

Los mejores amigos desobedecen la orden dada por sus jefes que consiste en no hablarte y te llaman por teléfono… Aún cuando estén a dos metros de distancia.

Los amigos perdonan que pierdas la pulsera de amistad que te regalaron en tu cumpleaños.

Los amigos recuerdan tu cumpleaños… La mayoría de ellos.

Los amigos siempre van, en horas de trabajo, a besarse al estacionamieDIGO, ¿¡QUÉ!?

Los amigos se quieren… Aish.

La amistad no existe sólo en una fecha ni se mide con obsequios, sólo se demuestra.

Que tengan un feliz día del amor y la amistad, amiguitos.